viernes, 28 de junio de 2013
El Hechizo
Julia se asoma al balcón todos los días. Busca, en la calle, ese paso conocido que le traiga a su amor. No falta jamás a su cita. ¿Y si viene y pasa de largo porque no está para recibirlo?
A veces, el cansancio la vence y confundida entra en la desvencijada casa. Se sienta en la camilla y recuerda el sabor del beso que él le dió. Lo recuerda mientras su vieja cafetera silba y humea en la cocina.
Siempre pone dos tazas. A él le encantaba el café bien fuerte, sin azúcar.
Julia sonríe mientras en la calle se pone el sol y un último rayo ilumina la fotografía que amarillea en la pared. En ella, un hombre con traje y sombrero abarca con su brazo a una chica de cara radiante.
Julia espera. Espera mientras el mundo se mueve a su alrededor. Inmovilizada en su gastada habitación y atrapada por una vieja fotografía. Un día, mientras espera, él se acercará con el atardecer, y, abrazándola gentilmente por el talle, le dará el último beso.
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Hola, vengo desde el blog de Jane atraída por este faro.
ResponderEliminarTu entrada es muy especial, me recuerda a una que tengo en mi blog, la titulé la Señorita Luisa, siempre esperando a su amor. Si no te importa me quedo por aquí.
Saludos.
Precioso y muy tierno.
ResponderEliminarMe gusta cuando cocinas dulces (incluyendo las trufas que no compartes).
Besos siempre.